¿Qué son los antioxidantes?
Los antioxidantes son sustancias que ayudan a eliminar de nuestro cuerpo toxinas llamadas radicales libres. Los radicales libres son subproductos normales del metabolismo, pero cuando se acumulan en exceso debido al estrés, la contaminación o los malos hábitos de vida (consumo de comida chatarra, drogas, exceso de alcohol, sedentarismo, etc.), pueden causar la destrucción considerable de células. Esta destrucción de las células puede, a su vez, deteriorar el sistema inmune y aumentar el riesgo de enfermedades crónicas y degenerativas.
¿De dónde se obtienen los antioxidante?
Los antioxidantes que el cuerpo humano necesita pueden ser de origen endógeno o exógeno. Los endógenos son los que el cuerpo produce, como son el Glutatión, el Ácido alfalipoico, etc. Los exógenos son los que se obtienen a través de la alimentación como son las vitaminas, los minerales y los flavonoides contenidos en las hojas, raíces y frutas, por ejemplo.
¿Por qué son importantes para el hígado?
El hígado es el principal órgano encargado de eliminar las sustancias tóxicas de nuestro cuerpo. Pero cuando hay un exceso de radicales libres en su interior y no hay suficientes antioxidantes para eliminarlos, las células hepáticas comienzan a deteriorarse y se acumula grasa en el interior del mismo. Esto hace que se produzca una enfermedad llamada “hígado graso”, la cual a su vez es una de las principales causas de dislipemias, obesidad, alergias y muchas otras enfermedades en el organismo.
Antioxidantes que benefician la función hepática
Los antioxidantes que contribuyen al buen funcionamiento del hígado, actúan ya sea inhibiendo la acción de los radicales libres y/o reparando el daño producido por los mismos en la célula hepática. Y según sea su mecanismo de acción, los podemos clasificar en tres grupos:
Antioxidantes secuestrados por radicales libres:
Son aquellos que atrapan y neutralizan los radicales libres. Entre ellos tenemos:
• Glutatión
• Ácido alfalipoico
• Vitamina C
• Vitamina E
• Cúrcuma
• Regaliz
• Resveratrol
Antioxidantes reparadores:
Son aquellos que ayudan a reparar el daño producido por los radicales libres en la célula hepática. Entre ellos tenemos:
• Glutatión
• Ácido alfalipoico
• Selenio
• Cardo mariano
• Alcachofa
• Aloe vera
• Vitamina B1, B2, B6, B12 y ácido fólico
Es importante aclarar que todos los antioxidantes mencionados son necesarios para el buen funcionamiento del hígado. Ya que ellos actúan de forma sinérgica o en conjunto. Además, la función de un antioxidante por lo general depende de la acción o la función de otro. Es por eso que, si la persona no produce la suficiente cantidad de antioxidantes o no los obtiene en la cantidad necesaria a través de la alimentación, debe suplementarlos para tener una buena salud del hígado y del organismo en general.
Esta información ha sido elaborada a partir de las reflexiones del Doctor Rolando Alberto Cabrales S. Director Médico de MNS (Natural Systems International).