¿Qué son los probióticos?
Los probióticos son microorganismos vivos que ingeridos en cantidades adecuadas tienen efectos benéficos para la salud, al ayudar al mantenimiento de la flora o microbiota presente en la mucosa intestinal. La flora intestinal está constituida principalmente por bacterias que viven de forma natural en el intestino, y con las que el ser humano tiene una relación de simbiosis, es decir, ellas requieren al cuerpo para seguir vivas y, de la misma manera, ellas realizan funciones vitales que el cuerpo no puede producir por su cuenta.
¿Cómo obtenemos los probióticos?
Están presentes en alimentos fermentados (como el yogurt o el kéfir) o se pueden tomar en forma de suplementos.
¿Cuáles son las funciones de los probióticos?
Los probióticos ayudan a repoblar o regenerar la flora intestinal, y ésta a su vez cumple con múltiples funciones en nuestro organismo, por ejemplo, absorción y producción de nutrientes como vitaminas, minerales, ácidos grasos y aminoácidos; ayudar al adecuado funcionamiento de nuestro sistema digestivo, inmunológico y nervioso; y proteger la mucosa intestinal contra microorganismos patógenos, entre otras múltiples funciones.
¿Cuándo se debería tomar probióticos?
Se debería aumentar el consumo de alimentos ricos en probióticos o consumir suplementos de los mismos cuando se presentan ciertas condiciones que afectan nuestra salud, tales como:
Consumo de antibióticos:
Cuando se consumen antibióticos se eliminan bacterias patógenas (las que producen infección), pero también se eliminan bacterias beneficiosas de la flora intestinal, por lo que debemos tomar probióticos para reestablecer la misma.
Enfermedades intestinales:
Los probióticos son fundamentales para disminuir síntomas como la inflamación, el estreñimiento y la diarrea, en patologías como infecciones intestinales y colon irritable.
Alergias e infecciones frecuentes
El 80% de las células del sistema de defensa están asociadas a la microbiota y al tejido linfoide de la mucosa intestinal. Es por eso que en caso de alergias o infecciones recurrentes hay que aumentar el consumo de probióticos.
Bajo estado de ánimo
La flora es la responsable del 80% producción de la serotonina, principal neurotransmisor encargado de regular el estado de ánimo, si hay disminución del mismo se puede producir tristeza y depresión. Es por eso que en caso de estas afecciones hay que regenerar nuestra flora intestinal.
Osteoporosis
Los probióticos son necesarios para la absorción del calcio y el magnesio, minerales fundamentales para la salud del hueso. Además, la vitamina K2 se produce en la flora intestinal, y ella es fundamental para la fijación del calcio al hueso. Es por eso que es fundamental tener una buena flora intestinal para protegernos contra la osteoporosis.
Esta información ha sido elaborada a partir de las reflexiones del Doctor Rolando Alberto Cabrales S. Director Médico de MNS (Natural Systems International).